Durante la campaña el ahora Presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que a su llegando al poder buscaría la Revocación de Mandato. Llegó la hora de poner al debate dicha propuesta, la cual ya se aprobó en la cámara de Diputados e irá al Senado a ser discutida y sometida a votación. Sin embargo, dada la naturaleza de la reforma - que es constitucional - también deberá pasar por los congresos locales.
La oposición se ha pronunciado con un rotundo no con dos argumentos principales: el primero es que se buscará tenerlo en la boleta de la elección intermedia para que los candidatos de MORENA al congreso y 13 gubernaturas que estarán en juego tengan un efecto similar al del pasado proceso electoral. El segundo argumento son las fobias de la reelección.
La idea que AMLO será quien hará que ganen los candidatos de MORENA en las intermedias del 2021 es cierta bajo dos premisas: la primera es que su Gobierno será bueno y por ende su popularidad no bajará y la segunda es que tendrá un efecto directo a favor en una las elecciones. Si es lo contrario, como la oposición señala ya que los primeros 100 días del Gobierno solo han dicho que todo está mal. Si todo está mal y la tendencia es empeorar ¿Cuál es el problema de la revocación de mandato? Al contrario, les estarán dando las herramientas a la oposición para que mediante métodos democráticos saquen al Presidente de Palacio Nacional.
Siguiendo con el mismo argumento sobre que tendría mucha popularidad, entonces ¿Se debe legislar sobre la revocación de mandato hasta que un Presidente tenga baja popularidad y sea propenso a perder una elección de esa índole? El legislar sobre la revocación de mandato no tiene que ser en función del contexto político, en el sentido de quienes se someterán a ese mecanismo de participación ciudadana tengan aceptación o no entre los ciudadanos.
No todo debe de verse de color de rosa desde MORENA y Palacio Nacional. También parten del supuesto que el Gobierno de AMLO mantendrá la aceptación que tiene. En política nada está escrito y en tres años pueden pasar muchas cosas. Si comienza a fallar la economía y los programas sociales, sigue la inseguridad y en general no cumple con las expectativas y parte del electorado, que lo llevó a la presidencia se decepciona, la oposición se reorganiza y construye una narrativa atractiva. La buena idea que aparentemente se tiene puede ser todo lo contrario.
Imagen: Informante.mx |
El segundo argumento sobre preparar el camino ante una reelección, no veo que tenga cabida. Esto debido a que no creo que pase por la mente del Presidente. Mas bien es la eterna manifestación de quienes se oponen a AMLO, buscar compararlo principalmente Chávez y ahora con Maduro. Lo cual quedó expuesto que esa narrativa ya no la compra la sociedad mexicana..
Supongamos que si quiere reelegirse el Presidente y la revocación de mandato, no es más que medir el terreno par ver si busca o no la reelección. No veo nada de malo en esto, partamos de la eterna premisa, el político busca el poder y mantenerse. Está en su derecho de buscar una continuidad como la oposición de impedirlo. De eso se trata la política, de estar una una dinámica permanente en la búsqueda del poder político, esto se da en cualquier democracia.
Ta vez siguen las fobias sobre la reelección debido a que aún no se tienen consolidadas las instituciones democráticas, y en el afán de buscar seguir el en poder se debilitarían más. Esto traería como consecuencia entrar en una crisis democrática.
Ta vez siguen las fobias sobre la reelección debido a que aún no se tienen consolidadas las instituciones democráticas, y en el afán de buscar seguir el en poder se debilitarían más. Esto traería como consecuencia entrar en una crisis democrática.
Es tiempo de quitarnos los estigmas del pasado, salir de nuestro estado de confort y replantear nuestro sistema democrático. Incluir más mecanismos - sin descuidar y reforzar lo que se tiene - de participación ciudadana trae como consecuencia la madurez de nuestra democracia.
En el fondo todo parece indicar que la oposición no quiere la revocación de mandato por una sola razón, se saben incapaces políticamente para ganar en las urnas.
En el fondo todo parece indicar que la oposición no quiere la revocación de mandato por una sola razón, se saben incapaces políticamente para ganar en las urnas.